Con frio y algunos copos de nieve, que no deslucieron en absoluto el acto, la Patrona de Cuenca recibía a la Virgen polaca en torno a las ocho de esta noche.
El cortejo estaba formado por los guiones de la Archicofradía y sus siete hermandades, el de las Angustias, el de la Virgen de la Luz y en andas, portada por sus hermanos la propia Virgen de la Luz, Alcaldesa Honoraria de la ciudad acompañada por nuestro Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo Mons. José María Yanguas.
Partiendo unos desde la Parroquia y otros desde la esquina del edificio de la Delegación de Medio Ambiente, ambas Vírgenes se unieron en el centro del puente, donde la Tuna de Acción Católica dedicó sus canciones a ambas Vírgenes negras. Después se regresó a la Parroquia, donde nuestros guiones pudieron rendirles honores formados en el pasillo central.
Ya dentro de la Iglesia el Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo ofició una sencilla ceremonia de bienvenida que terminó con el rezo del Santo Rosario.
Nuestra Hermandad estuvo presente con el guión y, como no, con varios hermanos.
La afluencia de gente, a pesar del mal tiempo, fue enorme, y el cortejo de las Vírgenes negras pudo sentir el calor del amor que les profesa el pueblo de Cuenca.
Bienvenida Madre.