A mis hermanos del Paso de la Caña. Por seguirte en tu calvario mi corazón te acompaña la tarde de Jueves Santo. El niño que fui me llama camino de San Antón, donde aguardan tu llegada, desempolvadas tulipas y cruces enamoradas. La espera llega a su fin. Las cuatro y media en Mangana. […]